Opiniones en DealExtreme: ¿objetivas?

Ayer estuve ordenando mis ficheros de facturas de productos que he comprado a través de Internet, debido a que una tarjeta micro SD de Samsung que compré en PC Componentes me había fallado y estaba buscando su factura para proceder a su reemplazo por la garantía. Al entrar en DealExtreme vi que se podían escribir opiniones sobre los productos que habías comprado y decidí practicar mi inglés para poner unas pocas líneas sobre ellos. En total, hice cinco opiniones, incluso poniendo fotografías de los productos.

Entre las opiniones, dos de ellas eran completamente negativas sobre los productos, ya que uno de ellos era un cargador de móvil que me explotó y otro era un cable USB rizado para el coche en el que se desoldaron los cables de lo poco flexible que era. Las otras tres opiniones, a pesar de indicar algunos aspectos positivos, también incluían otros negativos. Todas las opiniones quedaban pendientes de revisión por el equipo de DealExtreme.

Esta mañana he recibido los correos avisando sobre la aceptación o rechazo de las opiniones y ¡sorpresa!, las dos opiniones negativas han sido rechazadas, mientras que las otras han sido aceptadas. Sobre los motivos del rechazo sólo indican que, tras la venta, no se pueden hacer comentarios sobre su la baja calidad, sobre productos recibidos incorrectos o sobre la falta de envío de productos. Sin embargo, mis opiniones eran sobre la experiencia negativa con esos productos, pero no sobre su baja calidad como tal (que, en parte, es un motivo de que la experiencia haya sido negativa).

Por tanto, esto me hace pensar en la objetividad de las opiniones que se encuentran en DealExtreme sobre los productos, ya que si sólo se publican las opiniones beneficiosas y no las negativas, ¿cómo sabes si un producto tiene fallos? Aún sabiendo que la empresa está en un país que no se caracteriza por la transparencia y la objetividad, al menos sería conveniente que la web lo fuese, sobre todo porque venden a nivel mundial.

A partir de ahora, tendré más cuidado a la hora de tener en cuenta las opiniones de DealExtreme, puesto que viendo su proceso de revisión ya sabes que te puedes encontrar con sorpresas.

Obligación vs. voluntariado: entre tu profesión y tus aficiones

En estos días me estoy encontrando ante un dilema que por mi parte tengo muy resuelto, pero que veo que otros aún dudan. Yo creo firmemente que uno esta obligado a responder ante su profesión (en mi caso y actualmente como investigador), pero nunca obligado a responder ante sus aficiones. El caso es que algunos piensan que por estar apuntado a una u otra afición tienes la obligación de responder ante ésta, tal y como si fuese tu trabajo.

Cuando yo me apunté a mis dos aficiones actuales, karate y música, dejé bien claro que debido a mi profesión y mi estado de salud no pretendía tener ninguna obligación más allá de los compromisos heredados, y siempre y cuando pudiese. Curiosamente, en ningún momento me pusieron pegas. Pero parece que las palabras se las lleva el viento y algunos borran de su memoria los compromisos adquiridos. Entonces, creo que es el momento de refrescar estas palabras y, en caso de cambios «contractuales» firmes, resolver el mismo unilateralmente sin penalización alguna, al estilo de las compañías telefónicas.

En fin, como reflexión personal en mi blog, quiero dejar claro que yo en mi profesión tengo la obligación de cumplir en todo, pero no así en mis aficiones, las cuales yo considero voluntarias. Y esta voluntariedad viene justamente por ser actividades donde desarrollar nuestros talentos, donde divertirnos y distraernos para pasar ratos agradables, y siempre como complemento obligado al trabajo para el enriquecimiento personal.

ZoneAlarm y el bloqueo de una nueva interfaz de red inalámbrica

El otro día, en el Grupo de Investigación donde estoy haciendo la Tesis Doctoral, decidimos que todas las conexiones por Wi-Fi iban a seguir el protocolo 802.11n, para poder aprovechar hasta los 600 Mbps de transferencia que ofrece. Como el único que no tenía una tarjeta de red con este protocolo implementado era yo, decidimos actualizar mi portátil usando componentes de otros ordenadores que se estropearon. Por suerte, había dos tarjetas de red, la Intel Wireless WiFi Link 4965AGN y la Intel WiFi Link 5100 que valían para mi portátil, sustituyendo la Intel PRO/Wireless 3945ABG, por lo que nos pusimos manos a la obra.

Grata sorpresa nos llevamos cuando, tras instalar la una y la otra en la ranura del portátil y conectar las antenas, Windows 7 (de 64-bit) reconocía ambas, se descargaba e instalaba los controladores, pero no reconocía las redes inalámbricas. Tras averiguar qué estaba pasando, probamos con la herramienta de diagnóstico de Intel, que nos decía que «El hardware inalámbrico no está enlazado con el controlador de transporte», y el solucionador de problemas de Windows nos informaba que «Windows no pudo enlazar automáticamente la pila de protocolo IP al adaptador de red».

Dedicamos unas cuantas horas buscando una solución en el maravilloso Google, probamos todas, pero sólo hacía empeorase la situación. Finalmente, en algunos foros comentaban que los programas antivirus o de cortafuegos pueden dar problemas. Probamos a desactivarlos, e incluso a probar la instalación de las tarjetas de red en el modo a prueba de fallos, pero no funcionaba.

Finalmente, me decidí por desinstalar el cortafuegos ZoneAlarm Free Firewall y mágicamente aparecieron las redes inalámbricas en la herramienta de redes de Windows. Al parecer, el cortafuegos estaba impidiendo configurar correctamente las interfaces de red, que por una parte está bien, ya que su función es protegerlas, pero por otra… ¡podía advertir del bloqueo! Así, una vez ya instaladas, configuradas y actualizadas, procedí a volver a instalar el mismo software de cortafuegos (para seguir estando protegidos), y todo funciona como la seda.

Actualizaciones de WordPress

Desde hace pocas versiones, he notado que las actualizaciones automáticas de WordPress han mejorado muchísimo. No sé si es debido a mejoras en mi alojamiento, o que realmente han mejorado la sección de actualizaciones, pero ahora funciona perfectamente con un solo click. Así, mantener WordPress y sus extensiones (plugins) actualizados no cuesta nada. ¡Gracias comunidad de WordPress! 🙂

Google Reader

Acabo de leer la noticia de que Google ha decidido apagar su servicio de Google Reader. Para justificar su cierre indica dos motivos, de los cuales uno entiendo y el otro no.

El primer motivo es que, como una buena táctica empresarial, prefieren centrarse en pocos productos y prescindir de aquellos menos usados y, por tanto, menos rentables. Esto lo entiendo, ya que es uno de los motivos más usados por las empresas para decidir qué productos mantienen en el mercado, qué productos eliminan, y qué productos lanzan. Y, de hecho, funciona.

Lo que no entiendo es el segundo motivo, en el que indican que el servicio estaba en declive. No dudo que sea cierto, pero creo que se debe a una mala elección empresarial. Primero, Google Reader es un servicio que apenas ha sido mejorado en estos años atrás, y por lo tanto ha ido quedándose atrás en usabilidad y funcionalidad. Y segundo, ¿fue una buena decisión eliminar la parte de comentarios para promocionar Google+? Yo creo que no, y que ha podido ser uno de los motivos de su declive.

Por otra parte, ¿por qué eliminan un servicio tan propio de Internet como es un agregador de noticias, sin ofrecer una alternativa Web en otro de sus servicios, como por ejemplo, en Google+? ¿Y por qué Google Currents no tiene una versión Web y permite la agregación de contenidos personalizados? Parece que no apuestan por la agregación de contenidos a través de RSS o ATOM…

En resumen, que nos quedamos sin un muy buen agregador de noticias, y tampoco nos proporcionan una alternativa similar que a su vez contenga aplicaciones para dispositivos móviles. En mi opinión, una decisión poco acertada en lo referente a su base de usuarios.